TESTIMONIALES
Segunda Parte
Historia del libro del portal.
Recuerdos mios, son como son
Inmodificables
(no rompan las bolas pidiendo otro final. Ni aún el verídico.)
De la serie bla-bla-bla
pero ahora con webmaster (no me digan que no está mas prolijo)
Fue durante una de esas muestras locales, de los famosos ochenta, fuera de temporada de verano, donde se exponía en nuestra galería zurdita el trasegado pincel del artista B., la quinta o sexta que hacía sobre el Diario de Ana Frank. Todas con ese éxito,(de ventas quiero decir), que ya no se ve ni se disfruta. Lo mas rancio (en el buen sentido, segunda acepción) de la colectividad judía y del PC local. También lo menos-menos de la rama artística y muralista del partido, línea local. La muestra como siempre resultó vendida en su totalidad en plena inauguración. A las pocas semanas, repetida se vendería en la sede del Centro Israelita Marplatense, entre lágrimas de dolor por los recuerdos para aquellos viejos moishes que todavía conservaban los números en los brazos y los jóvenes empresarios proclives a las enseñanzas de Marshall y su seminario rabínico latinoamericano y que con chequera en mano se iban haciendo propietarios de los repetidos cuadros.
Pero la historia tiene que ver con el otro pintor, de la izquierda si, pero peronista, el que había vuelto a su patria chica. La época, fue antes de marcharse de mardel para su aventura bahiense con la “Colorada”. Estaba con su corte femenina y el vino, la cantidad de gente, el éxito de su amigo B. lo puso eufórico (un poco más que de costumbre). Nosotros jóvenes hinchapelotas, adictos al vino gratis, nos habíamos entretenido pasando los dedos y algún pañuelo por zonas de algunos cuadros de más de cinco centímetros de espesor y que por el olor a trementina y querosén y la densidad demostraban haber sido pintadas apenas unas horas atrás. Algunas de las damas-artistas de la tendencia conceptual, pretendían llevar los pañuelos (en grupo), al expositor para que los firmara, pero conocida su fama de fauno- cascarrabias, pronto desecharon esa idea.
La conversación con el pintor-hijo pródigo, eran sobre un cuadro que trataba de terminar en esos días, sobre un perro ladrándole al mar, para presentar en el Salón Nacional, creo que quedó inconcluso. Del cuadro, el monólogo derivó a esculturas y tallas, (puertas) que había hecho para sobrevivir en Brasil. Animado por el vino, nos contó de una historia de su familia que había esbozado en su estadía en Francia en los setenta. Las reuniones con el escritor jazzero, amigo de su hermano quien había musicalizado alguno de sus poemas, hicieron que él le mostrara el boceto de su historia. Nos contó que el Belga, le dio forma y estilo y acentuó el surrealismo de un pueblo reprimido escondido bajo un árbol, el ombú (el portal) -¿Mareschal?- y la represión representada por unas enormes especies de cucarachas (¿Kafka?), todo esto verborrágicamente contado –casi actuado a puro ademán- y etílicamente escuchado por nosotros. En un momento que estábamos formando un trío con W. y E. nos invitó a ir a buscar a la casa de su madre el único ejemplar que dijo que le quedaba para viéramos y pudiéramos opinar. Fuimos en el viejo jeep de E. creo que era por Bosque Alegre, nos quedamos en el jeep, con una botella robada al vernisagge (especialidad de E.), al rato apareció con un paquete y nos fuimos para el viejo café Opera en la calle Independencia donde después el pintor se encontraría con su corte femenina comandada por la psicóloga crazy.
En una mesa al fondo y después de la segunda ginebra abrió el paquete, y sacó un libro forrado en papel madera, las hojas del prólogo y las finales habían sido prolijamente dispuestas bajo el papel del forro. La calidad del libro, muy mala, brillante y horriblemente reproducidos los dibujos a la manera de una historieta muy primaria. Recuerdo vagamente los terribles colores de los paisajes con preminencias de rojos, violas y cerúleos. Lo que lo hacía diferente a la historieta clásica era el mal manejo de los blancos, y las composiciones de las páginas, algunas de un solo dibujo, y entre ellas “sobresalía” un horrible retrato de un individuo similar a López Rega. Realmente parecían decenas de dibujos brillantísimos (no de brillantez sino de brillosos) tirados sobre un libro blanco hecho de hule, en esta época hubieran parecido fotocopias malas. Ninguno de nosotros se atrevió a leer una línea. Solo miramos los dibujos. No estábamos tampoco en estado para lecturas. El belga había pasado hacia poco tiempo por mardel, más bien había pasado por Baires, o más bien por Argentina, donde Alfonsín recién asumido no lo había atendido por consejo de algunos asesores y se retiró ya cansado de esperar una invitación oficial, estaba enfermo y moriría al año siguiente en París, posiblemente sin enterarse de nada de esto...
En un momento de cabeceos, ya tarde y con el aleteo alrededor de la rama femenina recién llegada de la muestra, el pintor desnudó al libro y me mostró que en la tapa y contratapa tenía sellos secos de entes de Electricidad y empresas de Petróleo americo-venezolanas, así como un prólogo que mas que dedicado a los autores del mismo eran un panegírico de las empresas capitalistas que promovían la cultura... me contó en sordina la historia. En Venezuela, se había enganchado a la hija del dueño de la principal empresa de electricidad del país. La chica era menor. El arreglo con el padre fue la publicación del libro, pero igual, siguió el romance, huyeron con la niña, y en un momento en que vivían en una carpa de lona junto al mar, fueron encontrados y él sacado de la manija del orto del país... y con prohibición de entrar más, si apreciaba su vida. Al volver a Europa, no le podía mostrar al escritor ese libro (había salvado alguno de los 300 editados), que se hubiera muerto antes de tiempo por la ignominia de tener esos sponsors imperialistas, él tan cubano.
Después la vuelta al pago, el libro oculto, vergüenza tapada por el forro (la de él) y el escriba muerto-mudo.
Oculto el broli y gracias a su personalidad paranoíca, creó un mito a base de fotos y textos fotocopiados que cada tanto reflotaba en algún reportaje donde se obstinaba en repetir la historia del Ombú y su sociedad con el belga... En los 2000 poco antes de morir se le re-editó, o se le editó (¿?) el libro, pero ahora los dibujos eran de un equipo liderado por un artista rosarino Emilio Torti, a la manera de. Me enteré de todo esto en el momento de escribir este post leyendo un blog peruano: “Esta historieta, que tanto Cortázar como Cedrón idearon para llegar al público masivo de un modo efectivo, nunca se publicó. En busca de un interesado que quisiera editarla, Cedrón le dejó los originales a una editorial de Venezuela, que sin su consentimiento hizo una pequeña tirada de 300 ejemplares, impresos con muy mala calidad, que nunca llegó a distribuir. Aunque se sintió estafado, como ya no podía entrar a Venezuela, se resignó a no verla publicada”.
Pero en uno de los párrafos siguientes aclara: “que para la edición del 2004, el autor se movilizó desde Portugal, hasta Buenos Aires con la única copia apócrifa que conservaba”. Y aquí me detengo ¿Por qué después de su apología el peruca usa la palabra “apócrifa” ¿...En el mismo párrafo dice “tirada de 300 ejemplares” y “nunca se publicó”, lo habrá mambeado el pintor como a mí en alguna tenida gastronómica latinoamericana...
Bueno terminó:
existió el belga,
existió el pintor,
existe el libro,
posiblemente sea yo el que no...
Apostilla del 7-4-08.
Diario El País, Suplemento Babelia
..." A mediados de los ochenta, Cortázar pasó también por Buenos Aires, proveniente de su residencia parisina. En esa época, la de los primeros años de la democracia, el escritor oficial era Ernesto Sábato y el presidente Alfonsín sólo tenía ojos para el autor del Informe sobre ciegos. Cortázar buscó infructuosamente ser recibido por Alfonsín, y al poco tiempo murió amargado por tamaña desilusión..."
Alejandro
Segunda Parte
Historia del libro del portal.
Recuerdos mios, son como son
Inmodificables
(no rompan las bolas pidiendo otro final. Ni aún el verídico.)
De la serie bla-bla-bla
pero ahora con webmaster (no me digan que no está mas prolijo)
Fue durante una de esas muestras locales, de los famosos ochenta, fuera de temporada de verano, donde se exponía en nuestra galería zurdita el trasegado pincel del artista B., la quinta o sexta que hacía sobre el Diario de Ana Frank. Todas con ese éxito,(de ventas quiero decir), que ya no se ve ni se disfruta. Lo mas rancio (en el buen sentido, segunda acepción) de la colectividad judía y del PC local. También lo menos-menos de la rama artística y muralista del partido, línea local. La muestra como siempre resultó vendida en su totalidad en plena inauguración. A las pocas semanas, repetida se vendería en la sede del Centro Israelita Marplatense, entre lágrimas de dolor por los recuerdos para aquellos viejos moishes que todavía conservaban los números en los brazos y los jóvenes empresarios proclives a las enseñanzas de Marshall y su seminario rabínico latinoamericano y que con chequera en mano se iban haciendo propietarios de los repetidos cuadros.
Pero la historia tiene que ver con el otro pintor, de la izquierda si, pero peronista, el que había vuelto a su patria chica. La época, fue antes de marcharse de mardel para su aventura bahiense con la “Colorada”. Estaba con su corte femenina y el vino, la cantidad de gente, el éxito de su amigo B. lo puso eufórico (un poco más que de costumbre). Nosotros jóvenes hinchapelotas, adictos al vino gratis, nos habíamos entretenido pasando los dedos y algún pañuelo por zonas de algunos cuadros de más de cinco centímetros de espesor y que por el olor a trementina y querosén y la densidad demostraban haber sido pintadas apenas unas horas atrás. Algunas de las damas-artistas de la tendencia conceptual, pretendían llevar los pañuelos (en grupo), al expositor para que los firmara, pero conocida su fama de fauno- cascarrabias, pronto desecharon esa idea.
La conversación con el pintor-hijo pródigo, eran sobre un cuadro que trataba de terminar en esos días, sobre un perro ladrándole al mar, para presentar en el Salón Nacional, creo que quedó inconcluso. Del cuadro, el monólogo derivó a esculturas y tallas, (puertas) que había hecho para sobrevivir en Brasil. Animado por el vino, nos contó de una historia de su familia que había esbozado en su estadía en Francia en los setenta. Las reuniones con el escritor jazzero, amigo de su hermano quien había musicalizado alguno de sus poemas, hicieron que él le mostrara el boceto de su historia. Nos contó que el Belga, le dio forma y estilo y acentuó el surrealismo de un pueblo reprimido escondido bajo un árbol, el ombú (el portal) -¿Mareschal?- y la represión representada por unas enormes especies de cucarachas (¿Kafka?), todo esto verborrágicamente contado –casi actuado a puro ademán- y etílicamente escuchado por nosotros. En un momento que estábamos formando un trío con W. y E. nos invitó a ir a buscar a la casa de su madre el único ejemplar que dijo que le quedaba para viéramos y pudiéramos opinar. Fuimos en el viejo jeep de E. creo que era por Bosque Alegre, nos quedamos en el jeep, con una botella robada al vernisagge (especialidad de E.), al rato apareció con un paquete y nos fuimos para el viejo café Opera en la calle Independencia donde después el pintor se encontraría con su corte femenina comandada por la psicóloga crazy.
En una mesa al fondo y después de la segunda ginebra abrió el paquete, y sacó un libro forrado en papel madera, las hojas del prólogo y las finales habían sido prolijamente dispuestas bajo el papel del forro. La calidad del libro, muy mala, brillante y horriblemente reproducidos los dibujos a la manera de una historieta muy primaria. Recuerdo vagamente los terribles colores de los paisajes con preminencias de rojos, violas y cerúleos. Lo que lo hacía diferente a la historieta clásica era el mal manejo de los blancos, y las composiciones de las páginas, algunas de un solo dibujo, y entre ellas “sobresalía” un horrible retrato de un individuo similar a López Rega. Realmente parecían decenas de dibujos brillantísimos (no de brillantez sino de brillosos) tirados sobre un libro blanco hecho de hule, en esta época hubieran parecido fotocopias malas. Ninguno de nosotros se atrevió a leer una línea. Solo miramos los dibujos. No estábamos tampoco en estado para lecturas. El belga había pasado hacia poco tiempo por mardel, más bien había pasado por Baires, o más bien por Argentina, donde Alfonsín recién asumido no lo había atendido por consejo de algunos asesores y se retiró ya cansado de esperar una invitación oficial, estaba enfermo y moriría al año siguiente en París, posiblemente sin enterarse de nada de esto...
En un momento de cabeceos, ya tarde y con el aleteo alrededor de la rama femenina recién llegada de la muestra, el pintor desnudó al libro y me mostró que en la tapa y contratapa tenía sellos secos de entes de Electricidad y empresas de Petróleo americo-venezolanas, así como un prólogo que mas que dedicado a los autores del mismo eran un panegírico de las empresas capitalistas que promovían la cultura... me contó en sordina la historia. En Venezuela, se había enganchado a la hija del dueño de la principal empresa de electricidad del país. La chica era menor. El arreglo con el padre fue la publicación del libro, pero igual, siguió el romance, huyeron con la niña, y en un momento en que vivían en una carpa de lona junto al mar, fueron encontrados y él sacado de la manija del orto del país... y con prohibición de entrar más, si apreciaba su vida. Al volver a Europa, no le podía mostrar al escritor ese libro (había salvado alguno de los 300 editados), que se hubiera muerto antes de tiempo por la ignominia de tener esos sponsors imperialistas, él tan cubano.
Después la vuelta al pago, el libro oculto, vergüenza tapada por el forro (la de él) y el escriba muerto-mudo.
Oculto el broli y gracias a su personalidad paranoíca, creó un mito a base de fotos y textos fotocopiados que cada tanto reflotaba en algún reportaje donde se obstinaba en repetir la historia del Ombú y su sociedad con el belga... En los 2000 poco antes de morir se le re-editó, o se le editó (¿?) el libro, pero ahora los dibujos eran de un equipo liderado por un artista rosarino Emilio Torti, a la manera de. Me enteré de todo esto en el momento de escribir este post leyendo un blog peruano: “Esta historieta, que tanto Cortázar como Cedrón idearon para llegar al público masivo de un modo efectivo, nunca se publicó. En busca de un interesado que quisiera editarla, Cedrón le dejó los originales a una editorial de Venezuela, que sin su consentimiento hizo una pequeña tirada de 300 ejemplares, impresos con muy mala calidad, que nunca llegó a distribuir. Aunque se sintió estafado, como ya no podía entrar a Venezuela, se resignó a no verla publicada”.
Pero en uno de los párrafos siguientes aclara: “que para la edición del 2004, el autor se movilizó desde Portugal, hasta Buenos Aires con la única copia apócrifa que conservaba”. Y aquí me detengo ¿Por qué después de su apología el peruca usa la palabra “apócrifa” ¿...En el mismo párrafo dice “tirada de 300 ejemplares” y “nunca se publicó”, lo habrá mambeado el pintor como a mí en alguna tenida gastronómica latinoamericana...
Bueno terminó:
existió el belga,
existió el pintor,
existe el libro,
posiblemente sea yo el que no...
Apostilla del 7-4-08.
Diario El País, Suplemento Babelia
..." A mediados de los ochenta, Cortázar pasó también por Buenos Aires, proveniente de su residencia parisina. En esa época, la de los primeros años de la democracia, el escritor oficial era Ernesto Sábato y el presidente Alfonsín sólo tenía ojos para el autor del Informe sobre ciegos. Cortázar buscó infructuosamente ser recibido por Alfonsín, y al poco tiempo murió amargado por tamaña desilusión..."
Alejandro
13 Comentarios:
Siga contando de estas historias, que después se las vendemos a Planeta. saludos
Ninio.
Que épocas aquellas, ellos tan stalinistas y nosotros que no sabíamos si transigir con la zurda posta y ser progres, o hacernos radichetas,o socialistas como nos decía su amigo el gordo Lazzara,pero siempre desconfiando de los perucas despues de Herminio, de Antonito de los ocho... ¿O no?.
Raúl-
Me contó Josefina de su blog y del post, lo leí y le recuerdo que eramos mucho mas de los tres que Vd cuenta,estaban el Bosco,el turco Nassif y algunos mas. saludos.
Muy buen post, Al-Ja. Su prosa está cada vez más virtuosa.
Saludos
Profe,
vió que le conseguí un "cliente", mas para su blo. La verdad es que Vds. no eran un grupo eran una banda.Vamos a tener que que hacer una muestra homenaje del CACM para que se junten de nuevo,el problema va a ser N. Jimenez.
Un beso,
Josefina
Ale muy linda su historia, pero si la condimentó como la nuestra, donde omitió lo único interesante y dio a conocer los detalles mas ridículos de la misma e invento pasajes solo productos de su febril imaginación ---Hummm.
karla
ninio
un manto de piedad.
Raúl,
ahora los recuerdos son agradables, pero que la pasamos como el culo con gente de mierda, y por una ciudad que no se lo merecia seguro.Y mire al amigo Lazzara tan socialista genial, termino sirviendo al radical equivocado.
Lope.
Si seguro, omito tantas cosas, tantos papelones, tantas cagadas.
Diego,
No es virtuosa por que nacio desvirgada, pero gracias.
Josefina
gracias por el cliente, lo del CAM ahora sería patético, y NJ, fué el lider equivocado, una lástima.
Karla
Vd, debería saber mejor que nadie sobre el poder de selección de la mente y los por que. Tambien la febril imaginación sirve para tapar pudores propios y ajenos.
Saludos
Alejandro.
Muy buena la historia,pero me extraña el rechazo a un escritor como Cortazar,igual me estoy haciendo adicto a sus textos. Saludos
Carlos
Muy buena la historía la leí completa.Yo trate con El en Bahia por un contrato que hicimos la gente del Supe para realizar tres murales, pagamos el anticipo pero nunca se realizaron.
Hugo Llerena.
Al-ja. Vd habla de la muestra de B. sobre Ana Frank ¿y la que hizo con el tema de las maestras mendocinas? o esas donde aparecia el mosntruoso zapallo naranja sobre fondo marron caca.Nuestros pintores del PC, Castagnino con sus caballitos, Berni con sus series super repetidas de sus hacheros etc. Monaco, Shurjin...
Roberto
A mi me contaron gente que lo conocía en Paris que "el Belga", murió de sida.
María-
Hello. This post is likeable, and your blog is very interesting, congratulations :-). I will add in my blogroll =). If possible gives a last there on my blog, it is about the MP3 e MP4, I hope you enjoy. The address is http://mp3-mp4-brasil.blogspot.com. A hug.
Me gustaría saber mas sobre esas muestras de Bruzzone, hace dos meses estuve en mar del plata en su museo,(algo lamentable)las fotocopias llenan todos los principales lugares donde falta la obra principal. ¿Sabe algo?
josé
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