¿Como que no hay bailarines? Pero la verdad, es que no es mi fuerte, lo mio es cantar tangos, siempre a los postres, una o dos tebollas adentro y a la hora de los brindis, por el estado etílico las amistades ya saben que "cantaré" opera o tango. Todo en su medida alcohólica y desarmoniosamente como diría el General en pedo. Conocí muchos cantores buenos pero solo uno es el elegido, Roberto y su parkinson y les regalo a Gardel. Y despues en segundo puesto pero lejos, Luisito Cardei, ese enanito, armonioso cantor a capella en bodegones y cantinas que lo hacía entre las mesas ( casi su altura) y al que fuimos con Carlitos, solo para mancharlo con los fideos con tuco pedidos expresamente, para hacerlo cuando pasara al lado nuestro, premeditado durante meses; Pizzano (Antonito), el bandoneonista, su solo acompañante eterno nos miró con odio. El después nos dedico "La casita de mis viejos", la propina fue mayor a lo pagado. En el noventa en Mexico descubrí a la vuelta, en el aeropuerto, una maquina donde uno diagramaba y se hacía tarjetas de presentación en el momento. Volví con una cajita que decía "APB, cantor frustrado de tangos", las repartí en alguna muestra cuando los otros repartían "XXX artista plastico"...pobres giles...
alejandro
3 Comentarios:
No entendí lo de los fideos, ¿se los tiraban?, y ojo que no quiero decir que le tiraran el fideo a luisito...
Fue un mal chiste, pero fué verdad, cosa de pendejos, aunque ya no lo eramos.
El Polaco en la cima del podio, sin dudas, suba una grabación y vemos si le damos medalla de bronce =P
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