SEMANA DEL COLOQUIO DE IDEA, SIN UNA PUTA IDEM. Y YO PREPARANDO MI RETIRO DE LA CRITICA POLITICA, PARA VOLVER AL TALLER DE DONDE NUNCA ME TENDRIA QUE HABER IDO

Fue la semana del coloquio. No hubiera ido, bueno tampoco me hubieran invitado. Llevaron hasta a la Marta, “la gran bestia pop” (la Minujín), posiblemente haya ido como tarea comunitaria para demostrar como queda una ex adicta más quemada que un fósforo, -en otra época hubiera sido contratada por el grupo italiano de la bolsa- (fósforos Ranchera), esto es algo tan “interno” y tengo que aclarar tanto, que más parece una disertación de Felipe Pigna que un chiste corto, pero los de mas de 70 se que lo agarraron al vuelo, aunque por desgracia o no leen blogs o el alemán los dejó muy estrolados.
Marta corrió por los pasillos ladrillosos del hotel, haciéndose fotografiar al grito de Arte, Arte!! ininteligible por los cornalitos que se le escapaban de los labios. Detrás de los cortinados la espiaba su hijo-manager, con su libro (el de "los nuevos pobres") bajo el brazo¸ y desde”arriba” su ex economista y marido. Desde el primer piso y mirando la cancha de golf se mimaban Heller y Pescarmona, tratando de convencerse el primero sobre las políticas de distribución, y el segundo dándole gracias a Dios y pidiendo que lo dejaran renunciar...
Me pone nervioso ver tanto poder junto, a mí que el poder me importa tan poco, sólo la gloria me hace levantar la ceja. No apareció nadie del gobierno, y todo se fue diluyendo mansamente, casi ni necesitaron leer los discursos sin agravios, ni sorpresas, sólo mostraban los papeles y el público aplaudía, bueno es una época en que lo que importa es la imagen...
Solo Solá, solo, solo... Y acá todo seguía detenido en el tiempo, el presidente con gripe, posiblemente con laringitis, mudo...
La única novedad en Mardel (mi tierra), la compra de una empresa quebrada muy importante hace años por Hugo Moyano, (otro coterráneo de lujo); en poco tiempo ya tiene un gran hotel, una clínica y ahora estos galpones. Me olvidaba... por suerte le consiguió trabajo a su hijo más chico, “que lo tenía al pedo” (sic) y esta semana le hizo una huelga a sus actuales patrones.
Algo que pocos recordaron y me pongo en chismes, los treinta años de la muerte de Pedrito Rico, un gallego mariconazo, muy querido por mi abuela y que murió a los sesenta pero le seguían diciendo “el niño”, voz sin grandes colores pero figura de torero joven, muy ceñido el tio, en sus pantalones y toreritas bordadas con mucho brillo. Pero el gasto lo hacía en sus patillas, pelo grasoso y ensortijado muy negro, con cejas muy depiladas, y ojos apestañados con mucho rimel... un churumbel. Por casa, la gata mejorando, pero desconfiada con la comida, hay que probársela a la vista en su plato para que se atreva. Igual ve un Clarín y ladra.
Sé que algunas de las personas que pasan por este blog, están asombradas por estas incursiones en la política, pero como dijo Piña, ya me retiro, fue solamente una intervención como ciudadano, lo mio sigue siendo solamente pintar, dibujar y recopilar algunos textos acá. No es que me vaya floreciente en el ramo, en nuestro alicaído mercado todo se divide entre los difuntos, Kuitca y el resto y todavía los muertitos no alcanzaron al joven K, (puta, dije K sin querer), para los que les moleste este comentario, que no pretende ser crítico, yo solo hablo de mercado y no de arte que no es lo mio.
Se está terminando el día, no hubo reconciliación con el yorugua, lo que era de esperar, creo que ninguno de los dos son estadistas. Lula se habrá cagado de risa desde Brasil, tomándose una caipirinha y haciendo algún gesto obsceno e incompresible con su mano de cuatro dedos. La Ñ hoy una cagada, pero la voy a usar para asustar a la gata; Babelia, triste como el suplemento de La Nación de mañana, y no es predestinar solo seguridad de lector rutinario.
Alejandro