28 agosto 2006

QUE ERA ?...
TESTIMONIAL

...
la generación
de mi viejo
asocia
peronismo
con infancia.
...


Carlos Godoy, "Literatura de la subsistencia"


EVITA

Evita muerta,
Independencia hasta el cruce con Colón.
Ahí la cruz enorme, blanca,
cinco metros (de entonces),
ocho eran mis años puestos en esa marcha,
la lluvia, torrencial.
Pantaloncitos cortos de franela gris,
pesados zapatos, cubiertos con galochas,
amarronadas por la bosta de los caballos
que nos habían precedido.
Ni granaderos, ni gauchos,
club hípico regional,
bien conservas.
Yo:
camisa blanca, con corbatita azul,
con puntos,
como mierda de estrellas
en el estampado.
Las rodillas azules por el frio,
el delantal muy almidonado,
ya arrugado,
por la capa de goma,
pesada-helada-sucia.
Las orejas ardiendo por los papelitos,
que tiraban los que venían atrás.
Solo en el horizonte, el enorme culo de la maestra,
que ocultaba mi visión.
En las manos, ateridas
deshilachadas, dos florcitas,
robadas al vecino,
y escondidas a mi viejo (socialista),
como homenaje a él,
miré con mi primer
desprecio a los dos milicos, que
con polainas, fusil y bayoneta,
y capas mas sucias y mojadas que la mia
custodiaban la cruz,
Tiré las flores y escupí
despues busque con la mirada a mi vieja
para volver de su mano hasta mi casa.

27 agosto 2006

QUE ERA EL...

Dice Paniagua

¿Será hora de explicar lo de hace unos días? Hablo del desafío de ser progre. Hablemos de eso, de eso que las mejores mentes de mi generación (esas poetas primas del alma) perciben. ¿Qué cosas están en agenda hoy? La feminización del mundo, o, mejor, el fin de la guerra como organización del tiempo (y, decían por ahí, ah, el flujo de energía erótica que ello provocará...). Es decir, hablamos del mundo en el sentido contemporáneo, de 50 años para acá, ¿de eso hablamos cuando hablamos de hoy?
Así, de mis Cartas Quillotanas, desprendo:
-El peronismo es el progresismo posible.
-La política de la democracia es el fin de la política como continuación de la guerra.
-El progresismo es una manera de procesar el relato de la política, sin romper lanzas con la historia, con las tradiciones políticas argentinas.
-Y, la última verdad: no hace falta decirse progresista para serlo, porque, es cierto, demasiados equívocos lleva esa palabreja que ningún ingenio "popular" querrá resemantizar.

23 agosto 2006




QUE ERA EL PERONISMO? II

CAMINAS, CAMINAS, UN VELO BLANCO

caminás, caminás, un velo blanco
sembrando sus destellos de agonía
mueve el aire con prisa redentora.

Evita capitana aún respira,
el albo brillo transparente grita,
enterraron la muerte de mi cuerpo,
y luego la ensuciaron, la escupieron,
penetraron el sexo de un cadáver,
no soy esa materia, compañeros,
soy tiempo plebe, cuerpo de mi pueblo,
el pan dulce y la sidra bien helada
en los patios frondosos de las casas,
soy palabra que invoca, que construye,
palabra de la fiesta de estar vivos,

qué podrán sobre mí, si soy milagro,
mujer estéril, madre de millones,
la mala actriz, la puta, la fatídica
la santa que protege del olvido
la risa contagiosa de los pobres,
soy Evita Perón, descamisada,
entonación del habla popular,
que podrán sobre mí los utileros
del vicio nacional, los refinados
señores del decoro y la codicia,
las matronas cornudas de Quintana,
y la fusta, las manos repulsivas
de los vagos podridos en dinero,

qué podrán sobre mí, que ya no soy,
que grito sin gritar, y grito muerta,

así dijo la voz y el velo blanco
se hizo llama en la altura de los campos.

Luis O. Tedesco, "Aquel corazón descamisado", Nuevohacer, Grupo Editor Latinoamericano, 2002.

18 agosto 2006

QUE ERA EL PERONISMO?

POR QUE SOY PERONISTA

Primero, porque el peronismo le dio dignidad a la clase trabajadora (después se la quitó, con la anuencia de la misma clase, pero ése es un tema que el pensamiento político aún no ha resuelto). Segundo, porque mi abuelo fue dirigente sindical durante la gran década y mi viejo fue militante durante toda la proscripción, arriesgando su vida y su libertad. Tercero, porque conozco bien a los antiperonistas, conozco su clasismo y su racismo, sé cómo el peronismo desbarató sus mediocres sueños y no quiero formar parte de esa carpa ni ahí. Es conocida la pequeña pieza de Borges sobre un hombre que, meses después de la muerte de Evita, montaba en el Chaco o en Corrientes el velorio de una muñeca rubia cobrándoles una módica entrada a los lugareños, que así presentaban sus respetos a la señora. La conjetura de Borges: Perón y Eva, héroes de una crasa mitología. Eso es lo máximo que alcanzan los antiperonistas en su comprensión del fenómeno: la gente buena ignorante, en busca de trascendencia semirreligiosa, engañada por un siniestro demagogo. Olvidan que el pueblo peronista no es ingenuo ni crédulo, al contrario, es taimado y pícaro, y se identificó con Perón porque vio en él la versión superior de esas cualidades. Menem tenía las mismas virtudes y por eso cimentó la popularidad que le permitió convertir el PJ en el ariete de una política históricamente antiperonista, ya que todos los peronistas saben que no existe, no existió nunca, la ideología. El peronismo es el rizoma argentino y por eso los binarios, biunívocos, cuadrados cuadros de la izquierda y la derecha lo denostan por informe y poco riguroso, “populista”, dicen, pronunciando con la boquita fruncida esa palabra de puto. Están condenados a una perpetua frustración: sea cual sea el curso que tome el país, el peronismo, en alguno de sus sentidos y en todos a la vez, estará al timón.

Alejandro Rubio, "Autobiografía Podrida" Eloisa Cartonera, 2004.


LITERATURA DE LA SUBSISTENCIA

...
la generación
de mi viejo
asocia
peronismo
con infancia.
...
los troscos
y los comunistas
son los
últimos teóricos
peronistas.
...
el peronismo
es una moda
intransitiva
...
la poesía
de los '90 es
peronista
la literatura de hoy
es menemista
...
la revolución
consentida
como un hecho
social
es peronista
...
los comunistas
son peronistas
con un dejo
...
mirar para otro lado
cuando pasa alguien
que no queremos
saludar
es elusión
peronista.


De "Escolástica Peronista Ilustrada" Tomo III, Carlos Godoy

17 agosto 2006


UN CENTELLAZO
Guiso


Minga de fulería, siempre derecho,
de gurda jotrabó, ni una mancada.
A mala que se dio le puso el pecho.
Pa él lo mismo todo que la nada.
En el haber del yerno, ni espantada,
la va de tranquilino, es laburante.
Nunca un anzuelo le mancó tentada.
Pobre de pobre le metió adelante.
Nada ganó al final con todo eso,
con la honradez, si no salió de queso,
y anda tirao, de pucho, por el piso.
Con un cacho de voz que fue un murmullo,
la otra noche me dijo sin orgullo:
¡Pudo ser choro y no salió de guiso!

Julián Centeya


...La crisis económica del 30, con su secuela de hambre y mishiadura, otorga un nuevo matiz, mas amargo al verso lunfardesco. Ahí están para probarlo los tangos de Enrique Santos Discépolo, y "Sangre del suburbio", un tomito aún no bien valorado de Iván Diez, (Augusto A. Martini). Ellos descubren y revelan, con sarcástica ironía, la humilde tragedia de seres que hasta entonces no habían tenido un lugar en nuestras letras. Su humor ácido sirve de apoyo luego, en la recuperada Argentina del 40, a una lunfardía mas desenfadada y cachadora: la de "Amarroto, bien pulenta", o los recitales de Héctor Gagliardi.
De allí en adelante, queda instituída una especie de retórica lunfardesca, cultivada sobre todo por los investigadores del tema (caso de José Pagano, Bartolomé Aprile, Joaquín Gómez Baz, Julián Centeya, etc).

Breviario de Poesía Lunfarda, Selección y prólogo Eduardo Romano

03 agosto 2006


POEMAS (1959)
AMOR Y CONOCIMIENTO
JORNADA

Antes que la sed, el agua ya está pronta
antes que el hambre, junto al sabroso fuego del amanecer,
el carnicero en su barraca clasifica las partes
y el trabajo todo lo saborea y fortifica
llena de sentido a la paciencia que es agua de estanque
junto al sembrado.
Lo desconocido huye en vano
y lo conocido en vano permanece
mientras un pie se aventura el restante imprime su huella.
Cuando arrancas un fruto
tus pies se llenan de gravedad como raíces
y es la tierra la verdera raiz
Cuando arrancas un fruto el universo es sin duda tu tierra
y sobre la tierra aparentas ser semejante al fruto
sin embargo te basta morderlo para darle su sentido
te basta con arrojar semillas al surco para que
parezcas un árbol
una rama sobre la tierra
o el verdadero universo.

Horacio Pilar, Poesía Completa, Atuel /poesía, 2000.


Del epílogo de Raúl Santana

El 15 de febrero de 1999, un mes antes de cumplir los sesenta y cuatro años, Pilar, que había estado toda su vida tocado por la gracia, nos sometió a la gravedad de su muerte. Entre los amigos el anecdotario de su paso es inacabable; y siempre aparece Pilar conjugando esos elementos imponderables, que en su boca se combinaban como relámpagos e hicieron de cada momento de su existencia, aun en el dolor, instantes de bondad, belleza y poesía. Queda una obra poética llena de sobresaltos como su propia vida pero, tal como creo que el hubiera querido, abierta y trabajando hacia el porvenir.

01 agosto 2006


ENTRE PUTAS Y CHORROS
Julián Centeya, Cassette

LA CANA
A la final, ya ves, saltó la bronca
el gil, que se avivó, la fue de esparo
de cruzada un botón lo chapó al monga
y me sirven a mí, si no me paro.

Yo siento que ese fato mishio y raro
de vos me aleja y es lo que más siento
la parlo poco, lo sabés, y claro
y amas te es rejunao mi sentimiento.

Tu breón te cayó en cana, negra amada,
la tasuer me empaqueta de zarpada
y espero una aliviada en la sentencia.

Batile al bepi, que me fui de viaje,
portame entre otras cosas algún traje.
Yo me la aguanto. Vos tené paciencia.

Situando al poeta
LA NOVELA DE LA VIDA

fragmento (sobre Nira Etchenique)
por Marcelo Massarino

En la ciudad de Buenos Aires hubo una llamada Generación del ’60: poetas, escritores, letristas del tango y músicos que, recién hoy -cuarenta y cinco años después- es reivindicada porque impuso en la cultura un tinte costumbrista, hasta ese momento patrimonio de los tangueros. En muchos casos se quiere limitar la influencia de esta Generación al ámbito político por su compromiso en aquellos días turbulentos con más autoritarismo que democracia. Tiempos de una efervescente situación internacional que movilizaba a la juventud. El propio Juan Gelman señala que reducirla a la poesía política es un “malentendido”, porque sus integrantes tenían “un desenfado que ayudó a que los poetas se liberaran de determinados moldes”. Como dice Carlos Patiño, una Generación que “escribía ‘como sentía’ de los temas que ‘sentía’, de la forma que ‘sentía’ y esto la galvaniza y legitima”. La lista de nombres incluye a Alejandra Pizarnik, el propio Gelman, Roberto Santoro, Olga Orozco, César Fernández Moreno y Lubrano Zas, entre otros, junto al movimiento de la Nueva Canción con Armando Tejada Gómez y Hamlet Lima Quintana. Todos bebían de las mismas fuentes: Nicolás Olivari, Macedonio Fernández, Mario Jorge de Lellis, Raúl González Tuñón, Luis Luchi, Humberto Costantini y los poetas del tango Evaristo Carriego, Cátulo Castillo, Julián Centeya, Homero Manzi y Nicolás Olivari. Eran los días del Instituto Di Tella y de las revistas literarias El grillo de papel, El escarabajo de oro y Hoy en la cultura...
Revista Sudestada, Nº 44