29 julio 2006


EL HIJO PRODIGO
a Rómulo Macció

Regresé entregado, con ropa sucia, usada
en vías de abandono y disolución;
seguí el camino de vuelta a casa
escuchando pequeñas detonaciones de la memoria
con la esperanza de que alguien remendara mi ropa
       en esta misma puerta.

Lo esperado de mí , es una curiosidad abatida
       por esa multitud de horizontes
cuando un golpe de lejanía instaló el miedo
       en mi corazón.

El regreso es un destello arrebatado al curso
       natural,
una sombra espesa, ahora en mis ojos
       cegándome,
impidiendo que afronte el mundo con mi mirada.

Raúl Santana.
"Lengua Materna", Ediciones de Arte Gaglianone, Bs. As. 1981.




CONTRATAPA
por Antonio Dalmasetto
Diario Página 12 (2 de marzo de 1999)


Nos encontramos con Raúl Santana, una tarde de fines de febrero, para recordar a Horacio Pilar.
En el bar repasamos viejas historias. Los bares son el lugar al que se vuelve siempre. Para todo. Despedidas, reencuentros, festejos, desafíos. Mínimas liturgias de ciudad. Recordamos a Horacio Pilar y su poesía. Estando con Santana no es necesario recurrir a los libros. Desde siempre nos ha acostumbrado a su prodigiosa memoria. Puede recitar sin dudar a Montale, Borges, Vallejo, Elliot, algún poeta chino de tal o cual dinastía. También los poemas de Pilar...

Yo digo...
A Raúl lo conocí como critico de arte, como director del Museo de Arte Moderno de la calle San Juan, donde presentó y curó muestras memorables como la del grupo Cobra, tambien fue director del Palé de Glace. Magnífico poeta, memorista que causa asombro como dice Dal Masetto, capaz después de diez wiskies de recitar a los mejores poetas rusos en su idioma. Pero ante todo un amigo, con toda la magia del encuentro despues de semanas, meses o años, en la mesa del café, para seguir la conversación en el punto donde se había dejado...

Alejandro

23 julio 2006


VEINTE AÑOS DESPUES:
¡QUE TIEMPOS AQUELLOS!
(Reflexiones en verso, con aparato crítico y notas)

Estaba recordando a mis amigos, y todo lo que veía eran cadáveres, montañas de cadáveres.
Shostakovich (1)

¿Se acuerdan de aquel tiempo tan lejano,
de aquella luz que de Moscú venía,
cuando Stalin, que nunca se dormía,
cuidaba, humilde, el porvenir humano?

¿De tanta discusión árida y trunca,
pan venenoso de aquel tiempo ido,
puñal para el amigo más querido,
discordia cruel que no terminó nunca?

¿De aquel Stalin tan noble y tan heroico,
"padre de pueblos", "luz del siglo XX",
que al final resultó ser solamente
"un sádico vulgar y paranoico"? (2)

¿De aquel hombre de "gran sabiduria,
manos de obrero y traje de soldado" (3)
que en órdenes secretas prescribía
la tortura de cada desdichado? (4)

Recuerdan los "engaños" tan arteros
de la prensa burguesa occidental,
mientras Stalin "cuidaba" a los obreros
con sus bellos "bigotes de cristal"? (5)

Culpable para el hombre mas honesto,
asesinado Bujarin* moría,
peró mandó una carta que decía:
"José, José, ¿por qué me hiciste esto?" (6)

*Pronúnciese como una palabra aguda: Bujarín. Gracias. (T.M.S.)

Lo preguntó , pero de todos modos modos
lo daba Nicolás por descontado;
varios años atrás había gritado:
"¡Es Gengis Khan! ¡Nos va a matar a todos!" (7)

Y en la historia oficial, ya fusilado,
"Bujarin", se escribía con minúscula:
ningún traidor merece la mayúscula
con que se escribe todo nombre honrado (8)

Muchos, muchos compraron su boleto
para el "tren de la Historia", hacia Utopía,
y llegaron a un topos, donde había
sólo la muerte, en sórdido secreto.

Poetas y filósofos cantaban
al "hombre nuevo" del Jardín florido,
y ante un cambio en la liíea del Partido
a otro sueño fugaz se abandonaban.

¿Se acuerdan de Zdanof el asesino,
inquisidor con un disfraz de artista,
a quien un hombre puro y cristalino
apodaba "brillante dogmatista"? (9)

Y cuando con cincuenta megatones
la bomba en Rusia se mostró de veras,
escribió que "cincuenta primaveras
hizo estallar la URSS en sus regiones" (10)

Yo conocí un poeta muy sensible
que se mudó a la calle Rokososky,
y ese hombre tan cálido y querible
cantó al asesinato de León Trotsky (11)

Y aquel francés, un pensador intenso,
que confesó en un texto muy prolijo:
"Si los rusos me tratan como un hijo,
¿cómo quieren que diga lo que pienso? (12)

Mi amigo althusseriano era otra cosa:
vestía con dialéctica destreza
un traje Mao, confección francesa,
con botoncitos chinos, negro y rosa.

¡Que prisiones aquéllas! ¡Cuánta vida,
cuánta ilusión que terminó en escoria,
cuánta frivolidad sobre una herida
más honda que la noche y que la historia!

NOTAS
1) Citado por Alex de Jonge, Stalin, Emecé, p. 358.
2) Diagnóstico de Erich Fromm en Anatomía de la destructividad humana (siglo XXI, p. 287),
Fromm se ocupa del tema en la sección titulada "José Stalin, caso clínico de sádico no sexual"
3) Caracterización de Stalin imaginada por el escritor francés Henry Barbusse en Stalin, tempra
no ensayo apologético y hagiográfico.
4) Véase Nikita Kruschev, Informe secreto, donde revela que Stalin daba las órdenes precisas sobre el modo de torturar a cada detenido.
5) Esta notable metáfora pertenece al poeta peruano Alberto Hidalgo, figura en su poema Oda a Stalin.
6) Antes de ser fusilado, Bujarin envió a Stalin -"Koba", para sus viejos compañeros del Partido-un papelito que decía textualmente: "Koba, ¿Por qué hiciste esto?". Cuando Stalin murió, en 1953, sus sucesores encontraron la breve nota de Bujarin -su ex aliado contra Trosky- en un cajón de su escritorio. Stalin la había conservado junto a él. El historiador soviético Roy Medvedev relata este episodio en su libro sobre Bujarin, que he leído en la versión italiana. Puede verse también Stephewn Cohen, Bujarin y la revolución bolchevique (Siglo XXI).
7) Palabras de Nicolás Bujarin a Kamenev, quien fue fusilado antes que él. Detalles en Isaac Deustcher, Trosky, vol.2 (El profeta desarmado).
8) Sobre este filón apasionante de la condición humana, puede leerse sin daño alguno mi ensayo "Mayúsculas y minúsculas, tipografía del odio" (ver pag. 67).
9) Esta caracterización de Zdanof es de Pablo Neruda, quién así recuerda en sus memorias (Confieso que he vivido) al implacable burócrata de "las artes y las letras".
10) Otra vez Neruda. Su poema a la bomba atómica soviética de cincuenta megatones dice textualmente "Un gran sol de cincuenta primaveras / hizo estallar la URSS en sus regiones ".
11) Raúl González Tuñón, "Sobre el cadáver de León Trosky", Canciones del tercer frente, Ed. Problemas, 1941. También incursionó en el tema de las bombas "Que infinitamente delicadas (sic) me parecen tus bombas / oh madre Unión Soviética / invasora, agresora", escribió en su "Canto a la invasión de Finlandia" (ibid). Raúl era un hombre realmente encantador, ingenuo, mágico y generoso. Siempre será verdad que un hombre es muchos hombres." (Borges)
12) Se trata de Jean-Paul Sartre. Sus palabras literales son las siguientes: "Ah, sí, después de mi primera visita a la URSS, en 1954, mentí. Hice un artículo... en el que dije cosas amables sobre la URSS que no pensaba. Lo hice porque estimaba que cuando la gente lo invita a uno, uno no puede tirarle mierda apenas vuelve a casa" (sic). El texto se encuentra en Autorretrato a los setenta años (Situaciones X), Losada, Buenos Aires. Entre paréntesis, ¿qué deberíamos hacer si Gengis Khan "lo invita a uno"?. Sobrada razón tenía el propio Sartre cuando escribió: "Todos los escritores de origen burgués han conocido la tentación de la irresponsabilidad" (J.P. Sartre, ¿Qué es la literatura?, Losada , 1950, p. 7)

Thomas Moro Simpson. "Dios, El Mamboretá y la Mosca",
Editorial Sudamericana. 1974

19 julio 2006

REFERENCIAL
74, UN LUNES
DE NOVIEMBRE
(POR LA NOCHE)

Salí de cenar, lunes y había poca gente. Me fuí hasta Talcahuano y Charcas, (siempre me gustó decirle así, no me acostumbré al M.T. de Alvear), bajé al sótano oscuro y lleno de gente y humo, como todos los días, estaba el "polaco" terminando de cantar María, después le pedirían Sur y así. Caño 14, reventaba de gente. El agradecería medio duro, y después saldría Marconi con el Vanguartrio, a terminar la noche, ya era el descontrol, y la gente sólo esperaba el final de toda la compañía para irse al carajo, a la "famosa" noche de Buenos Aires, lo que incluía algunos cabarets, (Karim, Karina, etc), con minas que para volteárselas tendrían que dejar unos 500 ó 600 dólares de la época, además del "randebut", en el café de Córdoba y Pellegrini, en la vereda el último champan, y las primeras luces, canturreando los tangos mal habidos, algunos en extranjer.
Nosotros como todavía no eran las dos de la mañana, salíamos para "Cambalache" en Libertad y Córdoba, y mientras el trio se preparaba yo, me dedicaba a relojear el ambiente. Verdaderamente no cuajaba en ese lugar, donde el mas joven pisaría los sesenta, y menos por el pilchaje pobre. El hombre de ahí: traje o "elegante sport", y las minas cuanto brillo y textura se podía conseguir en esa época, rasos, sedas, tafetas, y tulcitos, y mucho chall de lana con metales, las luces de las bolas espejadas que giraban y que multiplicaban todo. Pero la característica del lugar y que era lo más excitante (por lo menos para mí), eran los olores, los perfumes pesados, las colonias baratas, los spray de pelo que retenían esos batidos abultados, o esas pelucas de nylon setentosas, y hasta los talcos. Y el olor de los sudores que mezclado hacía estragos en competencia con las fragancias, haci´éndolas ácidas y superando el olor de la descomposición de la carne. Mas de la mitad de las minas del lugar, trabajaban por la copa, y el saludo era el "Que me vas a invitar", que nunca podía bajar de un wiskie o un reserva San Juan (eso sí, poderosamente bautizados). Después de dos o tres copas, el primer baile, y el chamuyo para encontarse afuera o no. Cuando ya estaba todo por terminar entonces llegaba ella: Tania, la dueña del boliche, vestida como para el Maipo, con una corte de mariquitas que la seguían a todos lados, contaba dos o tres historias, que sabíamos de memoria, para lograr una aceptación de su público tenían que ver con sus infidelidades a su ex (Discepolín), su otro chiste era mostrar la última operación en las tetas, ante un ohhh, de su corte, aplausos y fin.
Después a Bachin, ahí aparecería el gordo, más músicos, leer el primer diario del día y cuando Zita apareciera para llevarse de una oreja al marido, todos saldríamos saludándonos, yo por mi parte a la espera de un día nuevo que terminará con esas rutinas tangueras, a veces se cruzaba alguna mina pero uno no estaba preparado para meterla en un camino que no llegaba a ninguna parte.
No fue una historia que duro mucho, el 76 estaba llegando y algunos cambios ya se notaban.

Alejandro.

17 julio 2006


POEMA DE CENTELLA

Quisiera amasijarme en la infinita
ternura de mi barrio de purrete,
con un cielo cachuzo de bolita
y el milagro coleado del barrilete

Verlo a mi viejo, un tano laburante
que la cinchó parejo, limpio y claro;
y minga como yo: un atorrante
que la va de sover y se hace el raro

Mi viejo carpintero era grandote
y un cuore chiquitín, siempre en la vía.
Su vida no fue más que un despelote
y un poco, claro está, por culpa mía.

Vino en el "Conte Rosso". Fue un espiro.
Tres hijos, la mujer, a más un perro.
Como un tungo tenaz la fue de tiro.
Todo sela aguantó: hasta el destierro.

Y aquí palmó...aquí está adormecido
Mi viejo, el pobre tano laburante.
Se la tomó una cheno de descuido
y me dejó un recuerdo lacerante.

Qué mundo habrá encontrado en su apoliyo
si es que hay un mundo pa los que se piantan.
Sin duda el cuore suyo se hizo grillo
y su mano cordial es una planta.

"Mi viejo", Julián Centella

13 julio 2006


AZAR, CAOS, Y OTRAS YERBAS
(LOS FRACTALES?)

...¿Qué es el azar? ¿Un producto de nuestra ignoracia o un derecho intrínsenco de la naturaleza? Si el azar es ignorancia, ¿qué sentido tiene decir que en la evolución del mundo interviene el despiste de un eventual observador? Es el azar ontológico (el Azar), y el epistemológico (el azar). Omarf Kayyam, por ejemplo experimentaba amargura con la conclusión determinista:
"La vida es tan solo un tablero cuyos
cuadros blancos
son los días y los negros las noches
con el que el Hado se divierte con los humanos.
Como si fueran piezas de ajedrez nos mueve a su antojo.
Y con penas humanas da sus jaques mate.
Terminado el juego nos saca del encasillado
para arrojarnos, uno tras otro, en el cajón de la nada."

y JLB:
..."No saben que la mano señalada
del jugador gobierna su destino,
no saben que un rigor adamantino
sujeta su albedrío y su jornada.
También el jugador es prisionero (la sentencia es de Omar)
de otro tablero de negras noches y blancos días.
Dios mueve al jugador, y éste, la pieza.
¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza
de polvo y tiempo y sueño y agonía"

Para otros, en cambio, la misma visión determinista del mundo supone la garantía de la verdarera libertad, paz interior, incluso el más alto sentido de la creatividad artística e intelectual.

Jorge Wagensberg - "Proceso al azar"

El poema de Borges no figura en la edición original.

10 julio 2006


REFERENCIAL 74,
UN LUNES DE NOVIEMBRE (1)

...me desperté tarde, el calor era insoportable, (el olor también), el techo de chapa, igual que la puerta y la pared con ventana fija ayudaban. Me lavé, peiné (cada vez que me bañaba el agua jabonosa llegaba hasta la camita, por suerte no había alfombra, sólo dos tapetitos a cada costado, deshilachados, sucios y ya sin flecos), salí al patio del hotel que era enorme, todas las habitaciones veintipico daban al mismo, el techo corredizo, transparente, en un plástico de fibra berreta con dibujos de plantas, ningún pasillo, solo la escalera, el piso de baldosones gastados ocupado por gigantescos macetones de color y enanos de jardín uno a cada lado de cada puerta como granaderos, eso sí del mismo color que las macetas, y algunos sillones de alambre también con almohadones de plástico rojo ( la decoración (?), prefiguraba un engendro posmoderno de un De Looft de pueblo del interior).
El hotel estaba sobre la calle Florida, casi llegando a Viamonte, sobre un comedero llamado Santa Generosa, (todo un presagio) donde caían todos los turistas que deambulaban por la peatonal. La ventaja (para ellos), era pasar ante largos mostradores repletos de comida donde no había mas que señalar con el dedo para que te la tiraran en la bandeja y te perforaran un largo ticket que llevabas en la mano. Lo "genial" era no hablar, tener tu bandeja, tu postre, tu vino, todo. A la mañana saliendo del hotel, al Tortoni o a la Galería del Este, lugares donde además de tomar algún café aprovechaba para dibujar, haciendo teatro por si salía la oportunidad de vender algo, en la galería todavía quedaban los históricos picacobres, y la librería fascinante donde algunas veces veía a Borges o Martha Lynch, o a Bioy, que firmaban ejemplares, para hipotéticos compradores. En el cafecito, (inventado por Mario, el actual dueño de Dada), con forma de pagoda en el centro de la galería, y con mesitas alrededor donde el personaje fijo siempre era Sergio Renán, y cientos de secundarios que entraban y salían como en una obra de teatro, la mayoría por la hora empleadas de los negocios o sobrevivientes de la "Manzana Loca"de los sesenta, que yo no había conocido. Después a tomar sol en la plaza San Martín, y llevar a la estación de Retiro a "equipajes", el paquete con los vidrios donde mostraba los dibujos en la plaza, con sus ganchitos de bronce, y el caballete todo desarmado donde colocaba los "cuadros" y los recortes de la revista Crisis Nº 20 donde estaban mis primeros bocetos, y el mengüado currículum, un tercer premio, tema la muerte de Perón, que me había entregado Oscar Robito,(tarzanito); el sábado siguiente retiraría a la mañana nuevamente el paquete para armar el chiringuito, (y si ese fin de semana llovía todo el resto de la semana siguiente a yirar, sin hotel, ni morfi). A la tarde y como una ceremonia repetida día a día, caía en un café de Corrientes y Esmeralda, donde estaban Hugo Diaz (el de la armónica), Marconi que en esa época estaba en el Vanguartango, y a quien le había dibujado la tapa del long-play, (pago con wiskies), algunas veces caía Troilo y un diariero que después resultó ser Mazzini, el modelo y actor (el trolo de los desnudos de "Pabellón 6"). Más tarde a la Payanca, a cenar temprano, porque los músicos se iban a tocar después a Caño l4...


continuará (?)
Alejandro

06 julio 2006

ABAJO TODAS LAS INSTITUCIONES
Y LARGA VIDA AL ARTE DE LA REVOLUCION
Santiago Llach
(nació en Bs. As. el 12 de mayo de 1972. Publicó tres libros de poesía)

Eso dicen todos; bueno, algunos.
Unos: le cantan al día del Fosfato y preparan
los pechos para las Flores de Mayo.
Otros alistan sus dedos en un pinball
de la Era del Hielo, y forjan
su mitología de autor en una piñata.

Hay de todo, hay de todo:
ahora, en tus ojos de cobre,
una vieja conocida
del Mundo de la Poesía.

Vienen canciones de alta prosodia:

esos días en la barranca fuiste
mi propia bandera de Jamaica,
negra, verde, amarilla y Blanca.

Ah, esta era sólo una canción más de amor.
Ah, esta era sólo una canción más de amor.
Era sólo una canción más de amor.

Tus versos de fuego me queman,
la la la, la la la, la la la.

Para Nataniel el Diurno, mi padre
PUTEADA ESDRUJULA, último insulto
Amleto Vergiatti
Para el pueblo JULIAN CENTEYA (1910-1974)

"El hombre gris de Buenos Aires"

Habré de inventarme una puteada esdrújula
para arrojarla contra la vidriera del mundo
y contársela después a Cendrás y a Rimbaud
que tan mierdamente vivieron como yo
Claro que habré de inventarme una puteada esdrújula
porque yo me he desentendido de un Dios
que permitió que César Vallejo se muriera de hambre
la tarde de un día gris que contabilizaba sus piojos
Habré de inventarme una puteada esdrújula
Ud dese por invitado
Se lo merece.